Jesús Quintero

Moratiel, desde pequeño habré rezado, aproximadamente, el Padrenuestro un millón de veces. ...  y todavía no me he enterado. Me gustaría que me lo explicara.

Cuando  dice: "Padrenuestro  que estás en los  cielos" ¿eso  qué significa?

P. Moratiel

Bueno,  yo te voy a decir Jesús, pues lo que... eso puede significar o puede ser vivencia, en este caso, para m¡, porque la oración no puede... sustituir a nadie. Yo me alegro mucho de que hayas dicho que lo has rezado, porque el Padrenuestro yo siempre pienso que más que  ser explicado es para ser rezado y por eso el pedirme que lo explique casi es pedirme una cosa casi imposible. Es para ser rezado. Es para pasarle por el corazón. Pero yo trataré de decirte por ejemplo, en esta primera palabra del Padrenuestro; creo que es una invocación, es como una llamada, es como un grito, creo que habría de decirla levantando los  brazos, como cuando esta mañana tú y yo nos hemos encontrado y sin pensarlo dos veces hemos levantado los brazos para cogernos. El decir Padrenuestro creo que significaría algo así, o habría  que expresarlo hasta corporalmente así, extender los brazos, porque...  Dios ... está siempre más allá de nosotros, Dios siempre está por encima y uno a veces experimenta como el deseo, como el... afán, el empeño de cogerlo, de tocarlo. Yo creo que orar siempre es tocar.

Jesús

... Padrenuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre, venga  a  nosotros tu Reino, hágase tu voluntad, así en la  tierra como en el cielo...

P. Moratiel

... ¿dónde quieres que nos detengamos...?

Jesús

 en lo de ..."hágase tu voluntad".

P. Moratiel

Verás, pienso que ... puede favorecer el pasar por el corazón esta palabra de Jesús, hasta hacer una especie de inclinación corporal. Cuando estamos de acuerdo con una persona, corporalmente, (creo que está presente en todas las culturas) está presente este gesto, uno inclina la cabeza, hace como una especie de reverencia, no es una  reverencia, es un gesto con el que uno muestra pues...  que está de acuerdo, que coincide, que está en sintonía con aquello.

Pues creo que cuando uno dice: "hágase tu voluntad, así en la tierra como en el cielo", quizás el hecho de hacer una especie de inclinación  podría ser una manera de ponerse en sintonía con esa voluntad de Dios, en el que uno realmente acepta, y acepta que en esta tierra que uno es, esta tierra que somos nosotros se cumpla pues... toda la justicia, se cumpla toda la bondad, porque no sólo es una dimensión...  digamos de la divinidad, sino que se cumpla todo el amor, estamos  diciendo "hágase" que se haga todo el amor, que se haga toda la bondad, que se haga toda la ternura, que se haga en esta tierra todo lo bueno, que funcione todo lo bueno, que... que siga funcionando toda la bondad, en esta tierra, en esta tierra nuestra y a la vez en esta tierra que nos rodea, en la que estamos pues metidos y sobre la que vivimos.

Jesús

"... el pan nuestro de cada día, dánosle hoy"

P. Moratiel

A mi me gusta mucho lo del pan. Me gusta mucho lo del pan Jesús, porque el pan es lo más cotidiano, y porque el pan... me gusta el pan, porque... me recuerda mucho a aquella mesa familiar, el pan siempre estaba rodando de un lado para otro, la hogaza iba de un lado para otro y se dejaba partir, y ...  ¡pásame  el  pan!, ¡párteme el pan!. El pan siempre está disponible. Pedir el pan, es una expresión de... de  vacío, es una expresión de... necesidad, habría que pedir...  habría que hacer esta súplica, esta petición, realmente con las manos vacías, pero totalmente vacías, vacías de tanto de dar, vacías de tanto ofrecer, vacías porque lo han dado todo. Entonces cada día uno puede decir, mostrando que las manos están vacías, volverse a ese Dios y decirle: -oye que tengo las manos vacías, necesito que me des pan-. Porque  uno que tenga las manos llenas, no puede pedir, uno que tenga las manos saturadas, no puede decir ... no puede decir de ninguna manera: -dame el pan- porque está saturado.

Por otra parte también me gusta el pan por otra cosa, que... como es tan fundamental, nos recuerda que lo fundamental ha de ser algo cotidiano, lo fundamental ha de ser algo sobre lo que descanse la atención constantemente, lo fundamental es el silencio, es el corazón y hay que estar presentes a él todos los días.

Quién sabe si cuando Jesús dice eso del pan, también nos está diciendo algo de esto: atentos a lo que es esencial, atentos a lo que es imprescindible, atentos al corazón, atentos al mundo profundo, atentos a la verdad que uno es... en definitiva.