57 - "Encomienda a Dios tus afanes, que él te sustentará"

 

 

 

Deja en Dios todos tus cuidados, todas tus preocupaciones, tus disgustos, tus contradicciones. A veces el silencio es bastante indiscreto, es como un crepúsculo donde se revela el mundo divino, pero también el mundo de nuestra agitación y alteración; pero no hay que entretenerse con ello; “el Señor te sustentará”.

 

En el silencio se hace presente este barullo, pero también se disuelve y trasciende. Todo se puede diluir en el silencio.

 

Deja en Dios todos tus cuidados, solamente él te sustenta y él es tu descanso.