"LA HOJITA" septiembre - 2.012

En el N. 66 que corresponde al mes de Septiembre de 2012 se incluye, en portada, el siguiente artículo:

 

“como ovejas sin pastor…

 

 

Ya no es tan corriente ver en nuestros campos la entrañable imagen del pastor, apacentando a su fiel rebaño de ovejas desde el comienzo del día, y recogiéndolas en seguros rediles al caer la tarde. Entre el pastor y sus ovejas,- acogidos en la soledad del campo-, existía una corriente de profundos y silenciosos lazos vitales. Las ovejas eran la razón de la existencia del humilde pastor, a la vez que el buen pastor era el guía y defensor de la vida de estas mansas e indefensas criaturas.      

 

No escapó a la mirada de Jesús esta bella imagen del buen pastor y sus amadas ovejas. En uno de sus encuentros con la multitud de gentes desamparadas de Galilea, el evangelista Marcos recogió los sentimientos de Jesús con las siguientes palabras:… vio una gran muchedumbre y se compadeció de ellos porque eran como ovejas sin pastor. Sabemos por la historia bíblica, que era muy grande la frustración, el desengaño y la desconfianza, que padecía buena parte del pueblo sencillo hacia los dirigentes político-religiosos. No obstante a este sufrido pueblo  siempre les quedaba la esperanza en que Dios enviaría un Salvador que les liberaría de una vida sin apenas aliciente alguno. Jesús respondió a situaciones como esta, alimentando los cuerpos y los espíritus, es decir, comunicando vida y esperanza.

 

También hoy día hay grandes muchedumbres de seres humanos que caminan por la vida como ovejas sin pastor. En nuestro mundo hay una inmensa multitud de mujeres y hombres totalmente desamparados a los que les falta un mínimo de bienes materiales para poder vivir como seres humanos. Son aquellos, que como nos dice el relato evangélico, pueden desfallecer en el camino de la vida por no tener nada para comer.

 

Hay también otros grandes grupos de personas en nuestra sociedad, que aunque tienen satisfechas las necesidades materiales, están vacíos de espíritu y caminan desorientados por la vida como ovejas sin pastor; muchas de estas personas manipuladas por los medios de comunicación se han refugiado en el consumo efímero, en los espectáculos deportivos, en los festivales de cantantes…, y, en algunos  casos lamentables, se han entregado a la droga al no encontrar sentido alguno a la vida.

 

Para todos nosotros valen hoy más que nunca las palabras de nuestro Buen Pastor, Jesús: “Venid a mí todos los que estáis fatigados y cargados que yo os aliviaré…; y hallaréis descanso para vuestras almas, pues mi yugo es blando y mi carga ligera”.